Por Fermín de la Calle (Patada a Seguir - Diario AS).
El rugby es un deporte de villanos practicado por caballeros... Eso suele decirse.
Pero ahora resulta que ya no es sólo cosa de caballeros, también las señoritas lo practican. Y no me refiero al rugby femenino. En el reciente campeonato de España de cadetes la selección de la Federación Andaluza de Rugby contó en sus filas con una chica, Jessica Arana, jugadora del CRAT Portuense.
Era la única fémina del equipo (y del torneo). Dirigida por Emir Heredia y Salvador Álvaro 'Pitu' sólo Jessica y sus 29 compañeros pueden presumir de haberse proclamado campeones de España.
Todos sus rivales fueron chicos, algo que no amedrentó a Jessica, medio melé que alterna entre los cadetes y el equipo de féminas. Este es el ejemplo de que el rugby, deporte eminentemente físico, lo que aumenta la diferencia de prestaciones entre los sexos, es además un deporte que integra y derriba viejos tópicos.
Jessica es el ejemplo más claro. Está lejos aún el día en que veamos a una chica jugando el VI Naciones masculino, si es que ocurre, pero es un placer ver chicas en las categorías de base demostrando que el rugby también es una forma de integrar a chicas y chicos. Un valor más del deporte que tanto admiramos y queremos.
Sirva esto como homenaje a la voluntad de Jessica, a la actitud de sus compañeros y a la iniciativa de sus entrenadores Emir y Pitu, que tan buen ejemplo nos dan a todos. ¡Suerte!
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