Se dice que el Rugby es un "Deporte de Villanos jugado por Caballeros", pero no sólo en el sentido masculino que deja entrever la frase. Lean el siguiente artículo publicado, hoy, en La Voz de Galicia ...
Las Chicas Pegan Fuerte (La Voz de Galicia)
Elevan el deporte del balón oval a su máxima expresión y alcanzan resultados internacionales muy por encima de los logrados por los equipos masculinos.
El Rugbi (sic). Ese deporte de rufianes practicado por caballeros y, en Galicia, sublime gracias a las damas. Las rugbiers coruñesas, al abrigo del CRAT Universidade, señalan con el dedo hacia los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, sin abandonar los valores y tradiciones que han forjado esta esforzada actividad, recogidos en el llamado Documento de Juego: labor educativa y socializante (nadie es discriminado por su complexión); esfuerzo máximo y solidario; juego duro, pero limpio; respeto por el rival (nunca enemigo) y por el árbitro (al que llaman señor); y tercer tiempo (comunión entre los dos equipos, el árbitro y el público tras el partido). Conceptos marginales en otros deportes. Filosofía de vida en el Rugbi (sic).
Hace unos 125 años, la irlandesa Emily Valentine se convirtió en la primera fémina en jugar el balón oval. En A Coruña, los nombres propios son los de Elena Roca, Berta García, Paula Medín y Vanessa Rial.
La centro Elena Roca es ya un mito del rugbi gallego. Abrió el camino de la selección española y acumula cuarenta internacionalidades, dos campeonatos de Europa, dos participaciones en Mundiales y cuatro en el Seis Naciones. Ella certifica que todos los tópicos antes mencionados son firmes pinceladas de realidad: «Casi todas comenzamos a jugar en el INEF y desconociendo el deporte. Nos tuvimos que buscar las castañas, tumbar preconceptos y todas tenemos nuestra profesión al margen».
La precariedad del Rugbi (sic) en Galicia (una liga con tres equipos -A Coruña, Vigo y Lalín- más otro foráneo, León, y uno en ciernes, Zalaeta) y la total ausencia de profesionalismo en España a estos niveles eleva el mérito de estas deportistas a la categoría de milagro.
Berta, Paula y Vanessa son el futuro. Mundiales, Europeos y presencias con la selección española van engrosando su hoja de servicios. Berta Alonso, ala (de origen asturiano), hace suya la máxima «Yo soy Rugbi (sic)». «Todo el compañerismo que mostramos en el campo continúa tras el partido. He ganado multitud de amigas íntimas», asegura con emoción. Paula, que juega de flanker, añade «la capacidad de superación». «Es mucho más que un simple deporte», concluye. La centro Vanessa clama por la cantera.
Del respeto al árbitro puede opinar Francisco Cobas, presidente del comité de árbitros de la federación gallega (de la que es vicepresidente) y secretario del nacional de la española. «Se aprende a respetar desde la base, es una cuestión de educación», explica. Corroborado por el presidente del CRAT, Alfredo López: «El equipo femenino contribuye al crecimiento del club. Son el orgullo en un país que trata al Rugbi (sic) como un deporte aficionado al plantar cara a profesionales de todo el mundo».
El CRAT maneja un presupuesto anual de unos 45.000 euros frente al millón de un club profesional en España o los 26 millones de uno francés. El equipo femenino supone un desembolso de unos 9.000 euros.Fuente: www.lavozdegalicia.es